Cómo escuchar a Dios

¿No ves que cuando ayunas, peleas, y golpeas a tus trabajadores? La forma en que ayunas hoy te impide ser escuchado en el cielo. ¿Es este el tipo de ayuno que he elegido?... ¿Es esto lo que llamas ayuno?... ¿Es este un día aceptable para el Señor? Este es el tipo de ayuno que he elegido: Aflojar las cadenas de la iniquidad, desatar las correas del yugo,  dejar que los oprimidos se liberen y rompan cada yugo. Comparte tu comida con los hambrientos, lleva a los pobres y sin hogar a tu casa y cúbrelos con ropa cuando veas ellos desnudos. No te niegues a ayudar a tus parientes.
Entonces... sanarás rápidamente. Tu justicia irá por delante de ti, y la gloria del Señor te protegerá por detrás. Entonces llamarás, y jehová responderá. Usted llorará pidiendo ayuda, y él dirá: "¡Aquí estoy!" Isaías 58: 4, 6-9

¿Has estado clamando para que el Señor te ayude en algún área de tu vida, tal vez renunciando a la comida o algo más, pidiéndole un gran avance, pero sin escuchar de Él en absoluto?  Resueno con este pasaje de las Escrituras, llamando a Dios, pidiendo una y otra vez que sane, y sintiéndome abandonada cuando la sanación no viene, desconcertada, sin saber lo que estoy haciendo mal. ¿No estoy siguiendo su voluntad? ¿No he confesado mis pecados? ¿No le preparé a mi marido una buena cena anoche y mantuve la casa limpia? Ok, sólo estoy bromeando sobre el último, pero realmente me he preguntado muchísimas veces sobre el aparente silencio de Dios.

Me encanta lo que el profeta Isaías nos está enseñando aquí acerca de escuchar de Dios, que el ayuno y la oración tienen su lugar, pero que Dios preferiría vernos abordando nuestras propias adicciones y ayudando a las personas en nuestra vida que necesitan ayuda. La forma en que tratamos a los demás tiene una correlación directa con nuestras oraciones para que se responda a la curación.  Imagínate un Dios justo que me sane aun si soy injusta con un empleado-- eso sería como si él aprobara mi comportamiento, incluso lo recompensara.

Cuando leo "Afloja las cadenas de la iniquidad, desata las correas del yugo, deja que los oprimidos salgan libres, y rompe cada yugo," es más fácil para mí pensar- bien, ahora es mi momento de "ayudar" a tal y tal persona que ya sé ha estado luchando con beber demasiado, o pornografía, o chismar, pues, una infinidad de cosas. 

Pero creo que el corazón de Dios siempre es comenzar conmigo mismo primero, que yo quito (con Su ayuda) el tablón de mi propio ojo primero, antes de intentar ayudarle a alguien. Puede ser que la curación que Dios realmente quiere hacer sea romper las cadenas de la iniquidad y romper la opresión en mi propio corazón y mente. Mi curación puede venir mientras trabaja en mí para eliminar cualquier yugo que me esclavice.

¿Hay alguien que venga a tu mente con quien tienes un conflicto? Tal vez sea tu vecino el que le encanta cortarle la hierba a las 6:30 a.m. los sábados, o tu tío que siempre viene intoxicado a cenas familiares, o tu amiga que siempre se queda sin dinero antes del fin de mes y no parece importarle pedirte ayuda. Aunque estos ejemplos no son indigentes o desnudos, pueden ser una representación más típica de con quién Dios nos invita a compartir-tal vez no literalmente con comida y ropa, pero en vez de lo que tiendo a hacer, que es molestarme, y en el mejor de los casos decir una oración por ellos y tratar de ignorarlos, alimentarlos con escuchar como han sido herida, y cubrirlos con compartir la palabra de Dios. 

¡Mi oración por todas nosotras es que pedimos la ayuda de Dios y que Él nos escucharía! Qué maravillosa promesa es: "Entonces llamarás, y el Señor responderá. Usted llorará pidiendo ayuda, y él dirá: "¡Aquí estoy!"

Evelyn Bou

Empatizo con el caos que el dolor traiga. Sé lo que es tratar de utilizar los recursos disponibles para mejorar, al terminar sintiéndose frustrada y aún más sola. Aprendí tanto sobre el dolor que me convertí en una coach certificada en el duelo y las relaciones, y profesional del trauma, con la esperanza de ayudar y brindándoles apoyo emocional a otras mujeres cristianas.

http://apoyocristiana.com
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