¿Por qué nunca hago lo correcto?

Estrategias de afrontamiento

Disfrazados de herramientas para ayudarnos a sobrevivir las dificultades y llevarnos mejor, las estrategias de afrontamiento nos distraen temporalmente del dolor no procesado. El afrontamiento viene en una amplia gama: desde el perfeccionismo, el alcoholismo e ir de compras, hasta las que a menudo se ocultan, como el sexo ilícito, las drogas y apostar.

Las estrategias de afrontamiento van mano a mano con los desencadenantes. Anteriormente, hemos examinado cuáles son los desencadenantes y cómo manejarlos, puedes leer el artículo aquí. 

En este artículo, vamos a examinar los siguientes puntos:

• ¿Cuáles son las estrategias de afrontamiento?

• ¿Por qué las utilize?

• Explorar alternativas más satisfactorias a largo plazo.

Agentes anestésicos

Si bien las estrategias de afrontamiento nos ayudan a adormecer los sentimientos dolorosos y la ansiedad, no nos ayudan a resolver problemas. Al utilizar estas estrategias, intentamos cumplir nuestras necesidades legítimas para ser conocidas y amadas de maneras que nos permiten ocultar nuestras imperfecciones en lugar de traerlas a una comunidad saludable. “Pero si vivimos en la luz, así como Dios está en la luz, entonces hay unión entre nosotros, y la sangre de su Hijo Jesús nos limpia de todo pecado,” (I Juan 1:7).

Hago lo que odio

“No entiendo el resultado de mis acciones, pues no hago lo que quiero, y en cambio aquello que odio es precisamente lo que hago,” (Romanos 7:15). Muchas de nosotras odiamos nuestras estrategias de afrontamiento y nos avergonzamos y arrepentimos mucho cuando las usamos. Continuamos participando en ellas aun cuando no tenga sentido porque estas pueden traernos un poco de alivio temporal. 

Quizas no sabes cual es tu estrategia predilecta, asi que, cumple esta frase: "Con el fin de lidiar con el conflicto con mi(s) (padres, jefe, marido, hijos, etc.), me calmaré con (comer, beber, tener sexo, tener un ataque de ira, etc.)" La única manera de dejar el comportamiento de afrontamiento es experimentar la profundidad de tu dolor con Dios y una comunidad saludable. Adormecer y disociar no ayudan en el largo plazo; Dios nunca nos llamó a una vida de sólo hacer frente, sino abundancia.

En algún momento estresante, todos usamos estrategias de afrontamiento. Con el fin de ayudarte a conocer unas que empleas con frecuencia, contesta las siguientes preguntas.

Procesar:

¿Qué haces cuando estás/tienes?:

Enojada-

Estresada- 

Cansada-

Triste-

Hambre-

 ¿Cómo tus intentos de calmarte te hacen daño a ti y a los demás?

¿Cómo tus comportamientos de afrontamiento te ayudan a obtener lo que necesitas? (Ejemplos: sentir menos dolor, sentirte mejor, sentirte más en control).

¿Qué es una cosa que podrías hacer en vez de tus comportamientos de afrontamiento?

 ¿Con quién puedes ponerte en contacto para no estar sola con tus sentimientos?

Si después de hablar con alguien de tu comunidad saludable y todavía tienes ganas de tranquilizarte con el comportamiento, sé gentil y misericordioso contigo mismo, recuerda que el cambio ocurre lentamente. 

Ten tu lista lista

Para que comiences a observar y entender como tus comportamientos de afrontamiento te afectan, escribe una lista de ellos para crear conciencia. Cuando tengas ganas de usarlos, es útil sacar la lista y decir: "Tengo ganas de calmarme por ____________ para que no tenga que lidiar con ___________". Decir esto en voz alta puede ayudarte a ver la relación entre el comportamiento de afrontamiento y las emociones no procesadas.

Estrategia de sobrevivencia

Las estrategias de afrontamiento te ayudan a sobrevivir, pero a medida que empiezas a crecer tanto emocional como espiritualmente, sobrevivir ya no es la meta. Sin embargo, dejar atrás estas estrategias significa hacer frente al dolor. Quizás te parece que sea necesario ocultar partes de ti para sobrevivir y superar tu dolor. Esconder partes de ti no siempre es malo, de hecho, puede ser bastante necesario, especialmente en situaciones inseguras o con personas tóxicas. Hablaremos más de esto en un momento.

Identificar el afrontamiento

Es útil identificar algunas de las maneras en que usas tus estrategias de afrontamiento. Examinar su función en tu vida y lo que obtienes de ellos te ayudará a entender lo que estás protegiendo, lo que sientes necesitar ocultar, y por qué. 

Recuerda, esconder partes de ti no es necesariamente malo, es beneficial en situaciones inseguras y con personas tóxicas.  Comprender mejor cuándo, con quién y por qué usas estrategias de afrontamiento podría servirte para saber si tal vez necesitas alejarte de una situación o poner fin a una relación que no te está ayudando a crecer espiritual o emocionalmente en la persona que Dios desea que seas. Exploramos la conexión entre escondernos y el comportamiento de afrontamiento.

Preguntas para Procesar:

1. ¿Cuándo tiendes a ocultar el verdadero tú? ¿Con quién?

2. ¿Qué partes de ti logras ocultar? (mi sexualidad, mi desorganización, etc.)

3. Cuando te escondes, ¿cuál es tu deseo más profundo?

Ejercicio

Siguiendo el ejemplo abajo, primero, escribe unas palabras sobre tus estrategias de afrontamiento (bebo demasiado). Luego, escribe su función o lo que hace por ti (ser más social, relajarte, dormir mejor, etc.). Usaremos la tercera columna, Alternativa, en el siguiente ejercicio, así que, por ahora, déjalo en blanco.

Ej. 1 

Estrategia de afrontamiento: Tomar demasiado

Función: Calmarme, dormir mejor, me ayuda ser mas social

Alternativa:

Ej. 2

Estrategia de afrontamiento: Intento agradar a la gente 

Función: Evitar el conflicto, la gente me quiere mas, puedo esconder mis verdaderos deseos

Alternativa:

Ej. 3 

Estrategia de afrontamiento: Comer en exceso

Función: Evitar tener relaciones con mi marido porque estoy gorda y no me persigue y me calma, me hace sentir consentida.

Alternativa:

Alternativas

La única manera de limitar los comportamientos de afrontamiento es crear conciencia de ellos y entender por qué los estás utilizando- ¿y por qué ahorita, y con tal persona, o sola? Teniendo en cuenta cómo las estrategias te ayudan, vamos a diseñar algunas otras maneras de satisfacer tus necesidades. Volvamos al último ejercicio, pensando en una posible alternativa para cada comportamiento.

Antes de comenzar a pensar en una alternativa para cada comportamiento, piensa en estas preguntas:

1. Cuando uso el comportamiento, ¿qué es lo que necesito? (amor, reconocimiento, alivio del estrés, autoprotección, etc.)

2. ¿Cuáles son otras maneras de obtener lo que necesitas?

Ejemplos de alternativos

Una alternativa al comportamiento generalmente supone tomar un riesgo. Las opciones deben ayudarnos a satisfacer la verdadera necesidad que tenemos, o seguiremos usando el comportamiento o estrategia. A medida que enumerar las opciones, piensa en lo que está en riesgo. Les doy tres ejemplos de posibles alternativas:

Ejemplo 1: Mi estrategia de afrontamiento es intentar agradar a la gente; es especialmente difícil para mí cuando necesito decirle ‘no’ a alguien o establecer un límite. Su función es ayudarme a evitar conflictos, y creo que la gente me quiere más cuando hago lo que desee. 

Una alternativa sería pedirle a mi comunidad saludable participar en una recreación de los papeles, para ver cómo imponer un límite apropiado con alguien importante en mi vida, y después dándome retroalimentación para ayudarme a que sea más fácil cuando necesite hacerlo de verdad.

Ejemplo 2: Mi estrategia de afrontamiento predilecta es la procrastinación. Me ayuda lidiar con sentirme tan abrumada con tantas decisiones en el trabajo y la vida. Cuando ya es demasiado tarde, elegir es fácil. Incluso me ha ayudado a seguir siendo tímida y evitar el foco que viene con el éxito. 

Una alternativa sería hacer lo que pudiera para reducir los factores estresantes y así usar mejor mi tiempo, y descubrir lo que el éxito significa para mí y por qué parece tener una aversión a él.