Soy cristiana, ¿Celebro el Halloween?

¿Celebro el Halloween?

Crecía en los Estados Unidos y cuando era niña, cada 31 de octubre, nos poníamos disfraces, y visitábamos las casas en nuestra vecindad pidiendo dulces. Usualmente me disfrazaba como una princesa o algo similar, nunca como una criatura malvada, y mayormente mis amigas hacían lo mismo. Era una tarde cada año en que el barrio estaba lleno de vaqueros, cantantes, y personajes de Plaza Sésamo. Pero, estamos hablando de más que 40 años, y puedo decir con toda certitud que por lo menos en los Estados Unidos, los valores familiares han evaporado. Ahora Halloween mayormente se ha convertido en una competición de quién puede ser el más sangriento y espantoso. Cuando voy a las tiendas, venden disfraces asquerosos, todas con un tema demoníaco, con mucha sangre, todo para asustar. Hasta los disfraces de princesa parecen ramera y no bella ni inocente. 

Alrededor de este tiempo del año, escucho el debate de como cristiana, ¿debo celebrar el Halloween? ¿Qué tal si voy a una fiesta de vendimiar en una iglesia, o si mis niños usan disfraces inocentes? Como cristianas, tenemos la libertad de tomar nuestras propias decisiones, siempre y cuando estén de acuerdo con la biblia. Como Halloween comenzó muchos siglos después de que se escribiera la biblia, no lo menciona. Pero la celebración céltica que se transformó en Halloween muchos años después tiene sus raíces en prácticas ocultas. A fin de cuentas, es tu decisión si tú y tus niños celebran Halloween, y si sí, cómo lo celebran. Solamente tú puedes decidir si tu y tu familia pueden participar en Halloween de una forma consistente con las enseñanzas de la biblia.  A continuación, incluyo estos versículos que espero te ayuden a tomar la mejor decisión de celebrar Halloween o no.

1.       Isaías 5:20: Qué mal les irá a los que a lo malo llaman bueno y a lo bueno llaman malo. Los que tienen por luz la oscuridad y por oscuridad la luz. Los que dicen que lo amargo es dulce y que lo dulce es amargo.

2.       Romanos 12:21:  No te dejes vencer por el mal, sino derrota el mal con el bien.

3.       Romanos 14:21-23: Es mejor no comer carne ni tomar vino si eso hace que tu hermano caiga en pecado. Es mejor no hacer nada que haga debilitar la fe de tu hermano. Tus creencias sobre estas cosas deben ser un secreto entre Dios y tú. Afortunado el que puede hacer lo que cree que es correcto sin sentirse culpable. Pero el que come algo dudando que esté bien comerlo, se condena a sí mismo porque va contra sus creencias. Así que todo lo que hagas contra tus creencias es pecado.

4.       I Corintios 10:21: Ustedes no pueden beber de la copa del Señor y, a la vez, de la copa de los demonios. No pueden compartir de la mesa del Señor y, a la vez, de la mesa de los demonios. 

5.       5.Gálatas 5:19-21: Está muy claro que las cosas que hace nuestra naturaleza carnal son: inmoralidad sexual, impureza, descontrol, idolatría, participar en brujerías, odio, discordia, celos, iras, rivalidades, peleas, divisiones, envidias, borracheras, parrandas y otras cosas parecidas. Ya les advertí contra eso y ahora les vuelvo a decir lo mismo, que todos los que hacen eso no tendrán parte en el reino de Dios.

6.       Efesios 5:15-16: Por eso hay que tener mucho cuidado con la forma de vivir. No vivan como la gente necia, sino con sabiduría. Esto quiere decir que deben aprovechar toda oportunidad para hacer el bien, porque estamos en una época llena de maldad. 

7.       Filipenses 4:8: En fin, hermanos, piensen en todo lo que es verdadero, noble, correcto, puro, hermoso y admirable. También piensen en lo que tiene alguna virtud, en lo que es digno de reconocimiento. Mantengan su mente ocupada en eso. 

8.       I Tesalonicenses 5:21-22: Examinen todo y quédense con lo bueno.  Manténganse alejados de todo lo malo.

9.       3 Juan 1:11: Estimado hermano, no sigas los malos ejemplos, sino los buenos. El que hace lo bueno es de Dios, pero el que hace lo malo nunca ha conocido a Dios.

En conclusión, nadie puede decidir por ti si celebrar Halloween sea apropiado o no para ti ni para tus hijos, pero la palabra de Dios nos guía hacia tomar una decisión correcta, poniéndole a Él primero.

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Evelyn Bou

Empatizo con el caos que el dolor traiga. Sé lo que es tratar de utilizar los recursos disponibles para mejorar, al terminar sintiéndose frustrada y aún más sola. Aprendí tanto sobre el dolor que me convertí en una coach certificada en el duelo y las relaciones, y profesional del trauma, con la esperanza de ayudar y brindándoles apoyo emocional a otras mujeres cristianas.

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