David permite que Absalón regrese

Una mujer astuta y una decisión tonta

En el previo estudio, Absalón mató a su medio hermano, Amnón, por haber violado a su hermana Tamar. Luego huye a la ciudad extranjera de Guesur para vivir con su abuelo. Han pasado tres años desde que Absalón huyó, pero David lo extraña y Absalón anhela regresar, no tanto por extrañar a su papá, sino para poder llevar a cabo el segundo parte de su plan. En este estudio, veremos cómo Joab convence a David de dejar que Absalón regrese a Jerusalén usando a una mujer astuta y si el príncipe realmente ha cambiado.

Joab, el general rencoroso pero leal

Recordamos a Joab, el general del Rey David, quien lideraba a los valientes de David, pero también no sabía controlar su rabia, matando al general de Saúl, Abner, cuando este hizo un pacto con David. Joab era muy leal a David, cumpliendo las órdenes de David de enviar a Urias a su muerte, sin cuestionarlas. Aunque era un hombre sin escrúpulos, también era uno de los hombres más cercanos a David, siendo su general, pero también su primo. Han pasado tres años desde que Absalón mató a su medio hermano y huyó a Guesur. Quizás por eso el texto dice que Joab sabía que David extrañaba mucho a Absalón. Por conocer a David tan bien, Joab sabía que no podría sugerirle al rey que perdonara a Absalón y traerlo de vuelta a Jerusalén. Tal vez pensara que sería mejor que Absalón regresara para poder vigilarlo, no perdonarlo. De alguna forma, Joab conocía a una mujer que el texto describe como astuta. Quizás estuviera muy motivada por ganar algo de dinero. Comenzamos la historia de la vuelta de Absalón a Jerusalén con el mensaje de Joab para la mujer.

Una mujer astuta para engañar al rey

2 Samuel 14:2-3: Por eso mandó a sus mensajeros a Tecoa para que trajeran a una mujer astuta. Joab le dijo a la mujer: «Vístete de luto, sin mucho arreglo, finge estar muy triste y haber llorado muchos días por alguien que ha muerto. Ve a ver al rey y dile lo que te voy a decir». Entonces Joab le dijo a la mujer lo que habría de decir. 

Vas a fingir ser viuda en problemas

El texto no identifica a la mujer de Tecoa, ni cómo conocía a Joab, ni cómo consiguió una audiencia con el rey, pero, a fin de cuentas, hizo lo que Joab le pidió, quizás por un pago, o por otra razón desconocida; conoceremos en breve porque el texto la describe como una mejor astuta. Cuando le toca presentar su caso ante el Rey David, le cuenta que es viuda, que tenía dos hijos, pero pelearon, y uno mató al otro. Ahora todos sus familiares quieren que les entregue al asesino para hacer justicia. Pero la mujer no quiere hacer esto porque ese hijo es lo último que le queda; además, si lo matan, su difunto marido no tendrá descendencia y un pariente heredará sus pertenencias. 

Después de contarle este cuento que es totalmente una mentira inventada por Joab, David le dijo que regresara a su casa, que él se encargaría del asunto. Le dijo que si alguien la amenaza, o le molesta a su hijo, que lo traiga ante él para sufrir las consecuencias. David no ora, no consulta a Dios ni a uno de los sacerdotes, sino toma una decisión motivada totalmente por la emoción y culpabilidad que se siente por no reconciliarse con Absalón. No piensa en la injusticia de aquel hijo que fue asesinado; protege a quien se debe castigar y castiga a quien debe proteger, exactamente cómo hace con su propios hijos. Parece que la mujer le convenza con su cuento, pero ni ha comenzado con su mensaje verdadero, solo suavizó el corazón del rey. Le pidió al rey decirle algo más y David le concedió su petición. Continuamos con el verdadero mensaje de esa mujer astuta.

Todos moriremos un día, ¿porque no te reconcilias con Absalón?

2 Samuel 14:13-17:  Entonces la mujer le dijo:

—¿Por qué ha planeado Su Majestad todo esto contra el pueblo de Dios? Al decir esto Su Majestad se declara culpable porque no deja regresar al hijo que desterró. Todos moriremos un día. Seremos como agua derramada en la tierra, que ya no se puede recoger. Su Majestad bien sabe que Dios perdona. Dios tiene planes para los desterrados que buscan refugio. ¡Él no los destierra! Le digo esto a Su Majestad porque la gente me atemoriza. Pensé para mí misma: “Me acercaré al rey, y tal vez él me ayude. El rey me ayudará y me librará del hombre que quiere matar a mi hijo y también a mí. Ese hombre sólo quiere alejarnos de lo que Dios nos dio”.  Su Majestad me hará descansar porque Su Majestad es como un ángel de Dios. Su Majestad sabe distinguir entre lo bueno y lo malo, y el SEÑOR su Dios lo acompaña.

Sabe distinguir entre lo bueno y lo malo, pero no lo hará

Esta mujer sigue en su mentira: no hay evidencia concreta que sea viuda ni que haya perdido un hijo, pero su cuento conmueve a David. Le pregunta a la mujer si Joab le envió a decirle todo esto, y ella confirma que sí, para que vea las cosas de una forma diferente. El texto no dice cómo David supo que fuera idea de Joab, quizás porque únicamente le contara a Joab cuánto extrañaba a su hijo. No hay castigo para esta mujer mentirosa. David envió a Joab a traer a Absalón de vuelta. Joab se alegra mucho con esta noticia. Continuamos con la reacción de Joab y la estipulación de David.

No sé porqué estoy tan feliz

2 Samuel 14:22-24: Joab se postró rostro en tierra, bendijo al rey David y le dijo:

—Hoy sé que cuento con el favor de Su Majestad porque ha aceptado lo que le pedí.

Entonces Joab se dirigió a Guesur y llevó a Absalón a Jerusalén.  Pero el rey David ordenó: «Absalón puede regresar a su casa, pero que no venga a verme». Así que Absalón regresó a su casa, pero no pudo ir a ver al rey.

Absalón puede regresar a su casa, pero que no venga a verme

El texto no especifica por qué Joab estuviera dispuesto hacer todo eso de modo que Absalón regresara a Jerusalén. Quizás se cansara de escuchar las quejas y melancolía de David, o, quizás como Absalón era el mayor, quisiera tener el favor del príncipe heredero, o tal vez pensara que sería mejor tenerlo de cerca para poder vigilarlo.  David exige no ver a Absalón, que no entre en el palacio. Está dispuesto a perdonarlo, pero no para reconciliarse con él, una decisión sabia. A lo mejor quisiera observarlo de distancia por un tiempo para ver si haya cambiado, si realmente esté arrepentido.

Entonces Absalón regresa a Jerusalén. El texto nos da unos detalles sobre la apariencia de Absalón que pocos otros autores bíblicos nos da. Continuamos la historia leyendo sobre lo guapo que era Absalón.

Era perfecto de pies a cabeza

2 Samuel 14:25-26:  La gente hablaba de lo bien parecido que era Absalón, pues no había israelita más apuesto que él. Era perfecto de pies a cabeza. Absalón se cortó el pelo al fin del año y su cabellera pesó 2 kilos. 

Pero tenía un corazón podrido

Como la mujer que contó ese cuento de ser una viuda desesperada, la perfección de Absalón era pura ficción. El texto dice que era perfecto de pies a cabeza, que no había nadie más apuesto que él, pero adentro, era orgulloso, engañoso y totalmente podrido.  El Rey Saúl también era admirado por lo apuesto que era, pero era totalmente corrupto. No olvidemos el cabello de Absalón; en unos capítulos, será su fin.

El texto dice que Absalón vivió dos años en Jerusalén sin ser permitido ver a su padre. Cuando había una reunión o cena familiar, no estaba invitado. A lo mejor viera a sus hermanos menores, y claro su hermana Tamar y madre, pero no a David. Tal vez Absalón no entendiera lo herido que David era por la matanza de Amnón. Absalón esperó que su papá castigara a Amnón, y cuando el castigo nunca vino, lo castigó, algo que, según su parecer, el rey debiera haber hecho hace años. ¿Por qué está enojado con él ahora cuando hizo justicia para su hermana Tamar? Su amargura crece, y lo que va a hacer próximamente no sorprende al lector.

Después de dos años, Absalón ya no estaba dispuesto a esperar más; le anhelaba ver a su padre y comenzar a prepararse para ser el próximo rey. Pero no pudo entrar en el palacio. Así que, como Joab iba a ser su general un día de estos, el texto dice que le envió un mensaje para poder ir a ver al rey, pero Joab se negó a hablarle. Absalón le envió otro mensaje, pero otra vez Joab se negó a hablarle. ¿Por qué se negó a hablarle cuando fue por la insistencia de Joab que Absalón regresó? Quizás Joab lo observara durante los últimos dos años y supiera lo malo que era, que no se arrepintiera de matar a su hermano, hasta lo haría de nuevo sin pensarlo. Recordamos que Absalón estuvo en Guesur por tres años, una ciudad pagana, fuera de Israel, donde, sin duda, no adoró a Dios, sino creció en su egoísmo. Cuando Absalón recibió la segunda negación a su pedido, se puso furioso. Nadie niega al perfecto y bello príncipe heredero. Absalón decidió hacer algo, para mostrarle que aunque fuera el general, era el príncipe quien realmente tenía el poder. Continuamos con la historia, leyendo lo que Absalón hizo para atraer la atención de Joab.

Vayan y préndanle fuego

2 Samuel 14:30-32: Entonces Absalón les dijo a sus siervos: «Miren, Joab ha sembrado cebada en el campo que tiene junto al mío. Vayan y préndanle fuego».

Los siervos de Absalón fueron y le prendieron fuego al campo de Joab. Joab fue entonces a la casa de Absalón y le dijo:

—¿Por qué tus siervos le prendieron fuego a mi sembrado?

Absalón le dijo a Joab:

—Te envié un mensaje pidiéndote que vinieras. Quería enviarte al rey para que le preguntaras por qué me pidió que regresara de Guesur. Hubiera sido mejor quedarme allá. Déjame ir a ver al rey y si soy culpable de algo, ¡que me mate!

Si sigues ignorándome, voy a tener la rabieta más grande que jamás has visto

Los siervos de Absalón eran muy leales, cometiendo un crimen para su amo. Al ver su campo en llamas, perdiendo toda la cebada, Joab fue a la casa de Absalón, sin duda totalmente furioso. Absalón parece un niño mimado cuando le contesta: pues, te envié dos mensajes, pero me ignoraste. ¡Hubiera sido mejor quedarme con mi abuelito y ni siquiera habría venido contigo si pensara que no me ibas a presentar en el palacio! Inimaginablemente, los berrinches de Absalón funcionaron. El texto dice que Joab fue a hablar con David, diciéndole lo que Absalón quería. David llamó a Absalón, y este fue y se postró rostro en la tierra ante su padre. En vez de reprenderlo por matar a su hermano, huir, y tratar a su general de una forma tan terrible, y sin que Absalón se arrepintiera y le pidiera disculpas, el texto dice que David lo recibió con un beso. ¿Todo perdonado y olvidado? Por supuesto que no. En el próximo estudio, Absalón tomará el trono de su padre y David huirá.