Encuentros angélicos en el nacimiento de Jesús

El importantísimo papel de ángeles en el nacimiento de Jesucristo.

A través de los acontecimientos que conducían al nacimiento de Jesús, Dios usó a los ángeles para comunicarse directamente con las personas involucradas. Vamos a continuar nuestro estudio aventamiento estudiando cuatro encuentros con ángeles: con Zacarías, María, José, y los pastores.

Este devocional es parte de nuestra serie sobre el advenimiento. Si te interesa aprender más sobre este tema en su contexto bíblico, recomiendo los siguientes devocionales en la serie:

Elisabet- pariente de María y por un milagro es la madre de Juan El Bautista

Juan el Bautista- tuvo un nacimiento milagro y preparó el camino para Jesús, El Mesías

José- el padre no biológico de Jesús

María- la virgen madre de Nuestro Salvador, Jesucristo

Los Pastores- los primeros en recibir la notica del nacimiento de Jesús

Los Reyes Magos- los sabios que visitan al niño Jesús, dándole regalos dignos de un rey

La Virgen de Guadalupe- por qué no debemos rezar a nadie más que a Dios

Zacarías- el padre de Juan el Bautista

Ángel con Zacarías

El Sacerdote Fiel

Zacarías era un sacerdote fiel a Dios y casado con Elisabet, un pariente de María. Los sacerdotes servían en el templo en turnos de una semana. Ese año, durante su semana de servicio, le tocó a Zacarías entrar en un área donde el sacerdote elegido tan solo entró una vez al año para ofrecerle incienso al Señor. Fue en este área sagrado que le apareció un ángel, y comprensiblemente, Zacarías tenía miedo. Comenzamos la historia con el primer encuentro angélico de las personas involucradas con el nacimiento del Salvador, con el mensaje sorprendente que el ángel tenía para Zacarías.

Anuncio del nacimiento de Juan el Bautista

Lucas 1:13-17: Entonces el ángel le dijo:—No tengas miedo, Zacarías, que Dios ha escuchado tus oraciones y Elisabet, tu esposa, tendrá un hijo, a quien le pondrás por nombre Juan. Estarán felices y llenos de alegría y muchos se alegrarán por su nacimiento. Juan será un gran hombre ante los ojos de Dios. No tomará vino ni ninguna bebida alcohólica. Aun antes de su nacimiento estará lleno del Espíritu Santo. Juan hará que muchos israelitas se vuelvan al Señor su Dios.  Con el mismo poder espiritual de Elías, él preparará el camino para el Señor. Hará las paces entre padres e hijos y hará que los que no obedecen a Dios cambien y piensen como él manda. Así Juan preparará al pueblo para que esté bien dispuesto cuando el Señor venga.

El Sacerdote Dudoso

El ángel le entregó un mensaje de gran alegría. Una parte de la función del sacerdote era ministrar y servir al pueblo judío, pero en este caso es el ángel quien servía al sacerdote, brindándole un mensaje maravilloso, de gran consuelo. El ángel le dio detalles sobre el hijo que tendría: Este niño tendría el nombre Juan, que haría cosas grandes para el reino de Dios, que aun antes de nacer estaría lleno del Espíritu Santo, y que le ayudaría a mucha gente volver hacia el Señor. Pero, Zacarías no estaba feliz. Ya no creía que podría ser padre. Como nosotros, se olvidó que Dios no está limitado por los hechos. Continuamos con la historia, leyendo este intercambio entre Zacarías y el ángel.

Lucas 1:18-20:  Entonces Zacarías le dijo al ángel:—¿Cómo puedo estar seguro de que esto pasará? Yo ya soy viejo y mi esposa tampoco es joven.

El ángel le respondió:—Yo soy Gabriel y estoy a las órdenes del Señor. Él me mandó a hablar contigo para darte esta buena noticia. Pero ahora, no podrás hablar hasta el día en que esto ocurra. Quedarás mudo por no creer lo que te dije, pero todo se cumplirá en el momento apropiado. (Itálicos míos).

El Sacerdote Mudo

Antes de expresar su duda, Zacarías no sabía que estaba conversando con uno de los ángeles más importantes, Gabriel, pero él se presentó para darles a sus palabras aún más fuerza. Cuando salió del templo, Gabriel cumplió su promesa y Zacarías ya no pudo hablar. Les hizo señas, y entendieron que algo le había pasado, pero Zacarías no pudo decirles el mensaje que Gabriel le dio. Quizás fuera mejor que Zacarías no pudiera hablar hasta que Juan naciera. Seguramente habrá mucha gente que no le creería, que se burlaría de él y así destruiría la poca fe que le quedaba.

El ángel Gabriel con María

El ángel Gabriel es uno de los pocos ángeles que la biblia menciona por nombre. Ese día tenía una misión importantísima que cumplir: ir a Nazaret y comunicarle a la virgen María que Dios le encomendó una misión privilegiada, ser la madre de Dios encarnado. Comenzamos el texto leyendo el mensaje alegre y a la vez aterrador que Gabriel le tenía para esta joven.

Lucas 1:28-33: El ángel entró al lugar donde estaba la joven y le dijo:—¡Hola! El Señor está contigo y quiere bendecirte.

Pero lo que dijo el ángel la dejó muy confundida y se preguntaba qué podría significar esto. El ángel le dijo:—No tengas miedo, María, porque Dios está contento contigo. ¡Escúchame! Quedarás embarazada y tendrás un hijo a quien le pondrás por nombre Jesús.  Tu hijo será un gran hombre, será llamado el Hijo del Altísimo y el Señor Dios lo hará rey, como a su antepasado David.  Reinará por siempre sobre todo el pueblo de Jacob y su reinado no tendrá fin.

¿Cómo sería posible?

Es entendible que María estuviera confundida. Era una virgen comprometida con José. Sabía muy bien las consecuencias que habría si ella tuviera un bebe mientras fuera soltera. María quería saber cómo esto sería posible, y Gabriel no la regañó, sino le explicó que Dios haría para cumplir su embarazo. Continuamos con la historia.

Lucas 1:35-37: El ángel le contestó: —El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra. Por eso al niño santo que va a nacer se le llamará Hijo de Dios. También escucha esto: tu pariente Elisabet, aunque es de edad avanzada, tendrá un hijo. Decían que no podía tener hijos; sin embargo, está en el sexto mes de embarazo.  ¡Para Dios nada es imposible!

No es la primera vez que un ángel la visita

María no le recordó las consecuencias de encontrarse embarazada siendo una virgen comprometida, ni se mordió las uñas con angustia. Como tenía el favor de Dios, es posible que no sea la primera vez que tiene un encuentro con un ángel, quizás la visitó anteriormente para prepararla por este momento. Quizás por eso es más fácil para ella aceptar el mensaje del milagro al contraste con Zacarías. Gabriel le dice a María, “No tengas miedo, María.” El mandato más frecuente en la biblia es el de no tener miedo. Sería natural en la posición de María tener mucho miedo e intentar planear cómo decirle a la gente que un ángel le habló sin sonar como una loca, cómo esconder su estado, y cómo evitar una posible muerte por lapidación. Pero no la observamos haciendo eso. Me imagino que sí tenía miedo, pero más que el miedo, tenía fe en Dios y creía que iba a cuidarla.

Un Ángel con José

José, el padre no biológico de Jesús, era un buen hombre, recto y lleno de fe en Dios, y como tantos otros en esta época, esperando la llegada del Mesías. Estaba comprometido con María, cuando le comunicó que estaba embarazada aun siendo una virgen. Como era un hombre recto, sabía que no fue suyo, nunca había estado a solas con ella, en fin, sin mencionar quitarle la pureza. Estaba triste y desilusionado; aunque no la conocía bien, había esperado ser feliz a su lado y tener su propia familia. Quizás María ya le explicó la visita de Gabriel, y no le creyó ese cuento. Sabía que era una muchacha de buena familia, pero eso de embarazarse del Espíritu Santo era demasiado. Quizás no le dijo nada porque todavía no estaban casados y por lo tanto encontrarse a solas era prohibido. Quizás se enteró de la peor forma posible, el chisme. Cuando María regresó de su visita con Elisabet, a lo mejor ya tenía una panza creciente. ¿Conoció a alguien en el camino? José no la conocía muy bien, pero confiaba en sus padres y ellos habían arreglado el matrimonio, y confiaba que ella provenía de una familia fiel, recta, criándola a cumplir con todas las leyes de Moisés.

Terminar el compromiso

Aunque podría, no quería hacer un escándalo ni verla apedreada, así que pensó terminar con ella en privado. No se puede negar la evidencia: estaba embarazada y él estaba lastimado. No quería vengarse ni avergonzarla públicamente, pero ya no pudo casarse con ella. Pero un ángel del Señor se le apareció en un sueño. Continuamos con el texto leyendo lo que el ángel le dijo en este sueño y cómo José reaccionó al mensaje.

Mateo 1:20-21: Pero mientras pensaba en esto, un ángel del Señor se le apareció en un sueño y le dijo: «José, descendiente de David, no tengas miedo de casarte con María, porque el hijo que ella está esperando es por obra del Espíritu Santo. Ella tendrá un hijo y tú le pondrás por nombre Jesús, porque él salvará a su pueblo de sus pecados».

Mensaje de consuelo

Pienso que José, a diferencia que Zacarías, se sentía aliviado con la visita angélica: confirmó todo lo que había creído, que María era una buena muchacha y que no lo había engañado. No sabemos si fuera Gabriel quien vio en su sueño, pero creo que era él cómo en los otros encuentros angélicos anunciando el nacimiento de El Mesías. José obedeció lo que el ángel se le comunicó, casándose con María de inmediato.

Un tiempo después del nacimiento de Jesús, unos sabios lo visitaron, trayéndole regalos y adorándolo. Después de que se fueron, José tuvo otra visita angélica en un sueño, una advertencia de que los soldados de Herodes fueran en camino para matar a Jesús. Continuamos con la historia, leyendo el segundo encuentro angélico y por segunda vez, como José respondió.

Mateo 2:13: Después de que los sabios se fueron, un ángel del Señor se le apareció a José en un sueño y le dijo: «Levántate y huye a Egipto con el niño y su mamá. Quédate allá hasta que yo te diga, porque Herodes va a buscar al niño para matarlo».

¡Levántate y huye!

El dictamen de Herodes fue matar a cualquier niño con menos de 2 años en Belén y sus alrededores. Es probable que se liberaron por el pelo de los soldados de Herodes. Otra vez el ángel se le apareció y él obedeció. Con estos encuentros angélicos, echamos un vistazo a lo que Dios vio en José: un hombre de fe, que no cuestionaría las instrucciones de Dios, sino obedecía y salvó la vida del Salvador del Mundo. No volvió a dormir, no esperó hasta la primera luz del día, sino despertó a María y Jesús y en la noche viajaron a Egipto. Con este mensaje angélico quizás quisiera quedarse un tiempo para advertir a sus vecinos con recién nacidos, pero no lo hizo porque así el ángel no le instruyó. Se fueron y se quedaron en Egipto hasta que Herodes murió. Cuando murió, otro ángel le comunicó a José que regresara a Israel. Vale la pena notar que el ángel no se comunicó con María, sino con José, respetando el sistema patriarcal que prevalecía en ese entonces. Continuamos la historia, leyendo el último mensaje angélico a José y como obedeció, regresando a Israel, para establecerse eventualmente en el pueblo de Nazaret.

Mateo 2:19-20: Después de que murió Herodes, un ángel del Señor se le apareció en un sueño a José en Egipto. Le dijo: «Levántate y ve con el niño y su mamá a Israel, porque ya han muerto los que estaban tratando de matar al niño». habiendo sido advertido por Dios en un

Ángeles con pastores

Forasteros en las afueras de todo

La noche que Jesús nació, había unos pastores comunes y corrientes en las afueras de Belén. Los pastores eran tipos con quienes no meterse, sabían cómo pelear. Muchos eran analfabetos, sin estudios, ni siquiera de la torá. Seguramente unos de los corderos que cuidaban serían sacrificados en el templo por los pecados de la gente. ¡Que maravilloso que Dios escogió a este grupo para ser los primeros en recibir las noticias del nacimiento de Nuestro Salvador, El Cordero que quitará los pecados del mundo! Vamos a comenzar esta linda historia, leyendo la aparición de un ángel a los pastores.

Dios escogió a este grupo para ser los primeros en recibir las buenas nuevas

Lucas 2:8-9: Cerca de ahí había algunos pastores que pasaban la noche en el campo cuidando su rebaño. Y se les apareció un ángel del Señor. El esplendor de la presencia del Señor los rodeó y se aterrorizaron. (Itálicos míos).

Lo extraordinario en una noche corriente

Imagina por un momento ser los pastores. La noche está silenciosa. El cielo brilla con millones de estrellas. Toman turnos para dormir un ratito y luego volver a proteger al rebaño y los otros pastores. De repente, se les apareció un ángel: es aun más espléndido y brillante que las estrellas, y presentían la presencia sagrada de Dios. Es totalmente comprensible que se asustaran.

Anuncio de los ángeles a los pastores

Lucas 2:10-14: Pero el ángel les dijo: «No tengan miedo, traigo buenas noticias que les darán mucha alegría a todos. Hoy en el pueblo del rey David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor. Como señal, encontrarán a un bebé envuelto en retazos de tela, acostado en un pesebre». De repente, junto al ángel, apareció una gran multitud de ángeles del cielo, y todos alababan a Dios: «¡Alaben a Dios en los cielos! ¡Que haya paz en la tierra para la gente que agrada a Dios!» (Itálicos míos).

«Les ha nacido un Salvador»

La primera cosa que el primer ángel les comunicó era que no tuvieran miedo, que su visita era la mejor posible. Les dijo que hoy les había nacido el Mesías, quien es para ellos- los olvidados, los sucios, los pobres- ¡a todos! Y este Salvador no nació en un palacio ni en una casa. Nació quizás como unos de ellos nacieron: pobre, sin una cama verdadera, acostado en un frío y sucio pesebre. Les dio una descripción específica para ayudarlos a encontrar al niño entre la muchedumbre en Belén para el censo. No es por coincidencia que el ángel se presentara ante los pastores; los pastores sabrían muy bien que envolatarían los corderos recién nacidos en retazos de tela; ahora El Cordero Salvador se acostaba en un pesebre, envuelto en retazos de tela.

Explotaron de alegría y comenzaron a alabar a Dios espontáneamente

Pienso que cuando los otros ángeles vieron al ángel darles las buenas nuevas, ya no pudieron resistir, explotaron de alegría y comenzaron a alabar a Dios espontáneamente. ¡Estaban extáticos por el nacimiento del rey de reyes!

 

Si te interesa seguir leyendo sobre las personas involucradas en el nacimiento de Jesús, sugiero los siguientes devocionales:

Un Salvador para todos- Los ángeles anunciaron el nacimiento del hijo de Dios a unos pastores, pobres y comunes.

Cuando Dios demora su respuesta- Zacarías no pudo creer que iba a ser padre, aunque el ángel Gabriel se lo dijo.

Diez cosas que quizás no sabías de la Virgen María- María no era como la pinta, blanca y con ropa intachable. Cuando conocemos la verdadera Virgen María, admiramos aun más su fe en Dios.

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