¿Es Satanás real?

¿Es Satanás real?

¿Es Satanás real? Si Satanás es real, ¿Cómo es? Si Dios es amor y todopoderoso, ¿Cómo Él podría permitir a un ser tan malvado tener el control de este mundo? Es importante saber que Satanás es real y saber un poco sobre él con el fin de saber cómo mantenernos fiel a Nuestro Creador, pero es poco saludable tener demasiado interés en Satanás ni en la maldad.  Hoy vamos a explorar lo que la biblia (y no la cultura) dice sobre Satanás, examinado su origen, cómo es y qué hace con su tiempo en la tierra, y cuál es su destino final. 

Este artículo es parte de nuestra serie sobre la maldad. Si te interesa aprender más sobre este tema en su contexto bíblico, recomiendo los siguientes artículos en la serie: El anticristo/la bestia- Será endemoniado por Satanás y será líder mundial durante la tribulación, El infierno- el último destino para todos que no han aceptado la salvación que Dios les ofrece, El falso profeta- Ayudará a la bestia y estará encargado de su adoración y la marca de la bestia, La tribulación- El periodo del tiempo después del rapto. Será el peor periodo de tiempo en toda la historia

Satanás no es igual a Dios para nada- no es su rival; Dios no tiene rival.

Origen de Satanás

Satanás es conocido por otros nombres: el diablo, el padre de mentiras, el dios de este mundo, el príncipe de este mundo, el dragón, la serpiente y otros. Satanás es un ángel caído, y no es igual a Dios para nada- no es su rival; Dios no tiene rival. Si quisiera, Dios podría destruirlo ahorita sin ningún esfuerzo. Tampoco es mono como una caricatura. Satanás era Lucifer, un ángel hermoso y poderoso como Miguel el arcángel. Pero por ser tan bello y poderoso, se sentía orgulloso y quería reemplazar a Dios; eso es lo que todavía quiere, ser una imitación falsa de Dios y recibir todo el honor y la gloria que solamente Dios merece.

Cuando se personifica a Satanás, normalmente es feo y horrendo, con cuernos y colmillos, pero la biblia no enseña eso. Satanás se disfraza como ángel de luz. Como era el hermoso Lucifer, pienso que todavía es bello, como la tentación. Si fuera feo, lo que nos ofrece no parecería tan atractivo, tan tentador. La tentación parece bella, hasta a veces parece buena, pero al pecar se revela la separación de Dios, lo cual es muy feo. Cuando Satanás quería destronar a Dios, había una guerra, un tipo de golpe de estado en el cielo. Escolares bíblicos estiman que hubiera una tercera parte de todos los ángeles quienes rebelaron con él, y también eran condenados a la tierra. Después de que Satanás fuera arrojado a la tierra, se consideró príncipe del mundo, con un reino temporal de odio e ira, con su meta principal siendo llevar tantas almas al infierno consigo como pueda. Es probable que esta guerra sucedió después de la creación, pero antes del jardín de edén, porque Satanás estaba allí en el jardín. Comenzamos el texto leyendo sobre esta guerra celestial.

Apocalipsis 12:7-9, 12, 17: Luego, hubo guerra en el cielo. Miguel y sus ángeles lucharon contra el dragón y sus ángeles. El dragón y sus ángeles fueron derrotados y perdieron su lugar en el cielo.  El dragón, esa antigua serpiente llamada también Diablo o Satanás, que engaña a todo el mundo, fue expulsado del cielo y fue arrojado a la tierra junto con sus ángeles. Alégrense los cielos y todos los que viven allí. Pero a ustedes, los que viven en la tierra y el mar, les irá muy mal; porque el diablo sabe que le queda poco tiempo y ha bajado furioso a donde están ustedes». El dragón se puso furioso con la mujer y se fue a pelear con el resto de sus hijos, que son los que cumplen los mandamientos de Dios y siguen dando testimonio sobre Jesús. (Itálicos míos).

Está furioso

Satanás estaba furioso cuando fue arrojado a la tierra y todavía está furioso. Es totalmente motivado por odio: odio por Dios lo cual descarga a sus sujetos, nosotros. Su ira le motiva a tratar de llevar tantas almas al infierno consigo como pueda, usando todos las herramientas que tenga, incluyendo la ira, el engaño, el orgullo, y la mentira. Cuando vivimos enojados, orgullosos, o mintiendo, somos herramientas que puede usar.  La ira mezclada con el orgullo es un poderoso arma que utiliza frecuentemente. Los profetas Isaías y Ezequiel nos dan un vistazo a los pensamientos y papel de Lucifer, su arrogancia, y su caída. Continuamos con el texto.

Isaías 14:12-15: ¡Qué caída tuviste desde los cielos, lucero de la mañana! … ¡cómo caíste derribado por el suelo!  Tú te decías: «Subiré al cielo, levantaré mi trono sobre las estrellas de Dios. … Subiré bien arriba, por encima de las nubes más altas y seré como el Altísimo». Pero has sido derribado hasta el lugar de los muertos, a las profundidades del abismo. (Itálicos míos).

Ezequiel 28:14-18: Fuiste elegido querubín protector, caminabas sobre carbones ardientes. Yo te puse como un dios de dioses en el monte sagrado. Desde el día en que fuiste creado, fuiste puro en todos aspectos, hasta que hiciste el mal. Todos tus negocios se llenaron de violencia y pecaste. Así que te hice salir del monte de Dios como algo profano, y el querubín que te protegía te quitó de entre las estrellas. Tu belleza te hizo llenarte de arrogancia. Tu esplendor corrompió tu sabiduría. Por eso te eché ante otros reyes, para dejarte en ridículo. (Itálicos míos).

Mientras está en la tierra, ¿qué hace?

Pedro describe el diablo como un león que busca a quién devorar. Después de ser arrojado a la tierra, Dios todavía le permite que Satanás tenga acceso a Su trono. Quizás el más claro ejemplo de qué hace con su tiempo en la tierra es descrito en el libro de Job. Vaga por el mundo, y en su enojo y odio, busca a quién devorar y destruir. Pero, Satanás no es omnisciente, omnipresente, ni omnipotente- tiene sus límites. Vemos como no puede causarle el mal a nadie sin el permiso de Dios. Dios le dio permiso de tomar el control temporario para que la humanidad pudiera ver y escoger por sí mismo a Dios o a la muerte y destrucción que Satanás nos ofrece. Ya no estamos en el jardín. No tenemos que seguir a Satanás, pero nunca olvidemos que es el gobernante temporalmente de este mundo. Continuamos con el texto de Job.  

Job 1:6-12: Entonces llegó el día en que los seres celestiales se presentaron ante el SEÑOR, incluso Satanás estaba allí con ellos. El SEÑOR le dijo a Satanás: —¿Dónde has estado?

Y Satanás le respondió al SEÑOR: —He estado vagando por la tierra.

Entonces el SEÑOR le dijo a Satanás: —¿Te has fijado en mi siervo Job? No hay nadie en la tierra como él. Job es un hombre intachable, honesto, respeta a Dios y rechaza el mal.

Satanás le respondió al SEÑOR:—¿Pero es que Job respeta a Dios por nada? ¿Acaso no lo proteges a él, a su familia y a sus posesiones? Haces que le vaya bien en todo lo que hace, y sus rebaños se ven por todo el país. Pero si le quitaras todo lo que tiene, seguro que te maldeciría en tu propia cara.

El SEÑOR le dijo a Satanás: —Puedes hacer lo que quieras con lo que le pertenece a Job, pero a él mismo no le hagas daño.

Entonces Satanás se retiró de la presencia del SEÑOR. (Itálicos míos).

¿Puedes imaginar qué habría pasado si Jesús no conocía muy bien la palabra? 

Tentar, engañar y manipular

Satanás tienta a la gente a pecar usando mentiras, engaños y manipulación, especialmente con la palabra de Dios, la cual conoce muy bien para utilizarla como un arma poderosa. Cuando tenemos hambre o sueño, somos más propensos a caer en la tentación. Después de ser bautizado, Jesús fue al desierto por 40 días sin comer nada y es cuando Satanás decide tentarlo. El texto en Lucas 4 nos presenta a tres veces que intenta tentar a Jesús. Las tentaciones cuestionan la bondad de Dios. Si Dios es bueno, ¿dejaría que Su hijo experimente el hambre? Si Dios es bueno, ¿no le daría a Su hijo autoridad de toda la tierra? Si Dios es bueno, ¿no impediría que Su hijo se muera? Satanás usa la palabra de Dios para tentarlo, pero claro, manipula la palabra y la utiliza fuera de su aplicación apropiada.

En la segunda tentación, le dice que si se arrodilla y lo adora, le dará todas estas naciones que ve. Lo que Satanás no le dice es que robó todas estas naciones y verdaderamente pertenecen a Dios, quien le dio permiso para gobernar temporalmente. Está pidiéndole a Jesús que esté de acuerdo con una mentira, que le daría algo robado, algo que ya le pertenece a Dios. A cada tentación, Jesús le reprende con la palabra de Dios sin manipularla. Siguiendo el ejemplo de Jesús, nos demuestra porqué es tan importante saber la palabra y saber cómo usarla apropiadamente, para que sea una arma poderosa. Como Satanás es un espíritu, no se cansa y no se rinde; el arma más eficaz contra él es la palabra de Dios. Vamos a ver lo que Satanás le dijo, cómo astutamente mezcla una mentira con la verdad, y cómo Jesús le contestó. Continuamos con el texto, leyendo el intercambio entre Satanás y Jesús.

Lucas 4:3-4, 6-8, 9-13:

El diablo le dijo:

—Si eres Hijo de Dios, dile a esta piedra que se convierta en pan.

Jesús le respondió:

—Está escrito: “No sólo de pan vive el hombre”.

El diablo le dijo:

—Te daré la autoridad y grandeza de todos ellos. Me las han dado a mí, y se las puedo dar a quien yo quiera. Si te arrodillas y me adoras, todo será tuyo.

Jesús le contestó:

—Está escrito: “Adora al Señor tu Dios y sírvele solamente a él”.

Entonces el diablo llevó a Jesús a Jerusalén y lo puso en lo más alto de un extremo del área del templo, y le dijo:

—Si eres el Hijo de Dios, tírate abajo desde aquí, porque está escrito: “Él mandará a sus ángeles acerca de ti para que te cuiden”, y “Sus manos te rescatarán para que ni siquiera te lastimes los pies contra las piedras”.

Jesús le contestó:

—Dicho está: “No pongas a prueba al Señor tu Dios”.

Cuando el diablo había intentado todo, lo dejó hasta una próxima oportunidad. (Itálicos míos).

No se rinde; espera otra oportunidad para tentar

¿Dios realmente dijo eso?

Cuando Satanás tentó a Eva en el jardín de Edén, usó la misma estrategia que vimos con la tentación de Jesús: cuestiona la bondad de Dios y manipula Sus palabras. Satanás le preguntó a Eva si Dios realmente les dijo que no podían comer de ningún árbol del jardín. Si eso fuera verdad, esencialmente Dios dejaría a Adán y Eva con dos opciones: morir de hambre, o matar y comer los animales, lo cual no hacían en el jardín. Si Dios realmente había dicho que no podían comer de ningún árbol del jardín, sería al contrario del carácter de Dios, poniéndolos en la tentación de comer, sabiendo que si satisficieran su hambre, estarían pecando. Pero, en vez de depravarlos, les dio comida en abundancia.

Eva le contestó con una media verdad, de que sí podían comer de los árboles, con la excepción de uno, pero de este ni siquiera podían tocarlo o morirían. Dios nunca dijo que no podían tocarlo. Con este primer pecado, comienza un patrón humano de añadir a la palabra de Dios, especialmente restricciones que no reflejan la palabra de Dios. Satanás le contestó con una media verdad: si comieran del árbol prohibido, no morirían, sino que serían como dioses, con el poder de diferenciar entre el bien y el mal. Efectivamente, después de comer, podían diferenciar entre el bien y el mal- pero eso nunca fue el plan de Dios. Quería que la pareja mantuviera su inocencia, su pureza, su relación perfecta con Él. Continuamos con el texto, leyendo el intercambio entre Satanás y Eva.

Genesis 3:1-5

La serpiente era más astuta que todos los animales salvajes que el SEÑOR Dios había hecho, así que le preguntó a la mujer:

—¿Es cierto que Dios les dijo que no coman de ningún árbol del jardín?

Y la mujer le respondió:

—Podemos comer los frutos de los árboles del jardín.  Pero Dios nos dijo: “No deben comer frutos del árbol que está en medio del jardín, ni siquiera tocarlo porque si lo hacen morirán”.

Entonces la serpiente le dijo a la mujer:

—Con seguridad no morirán. Incluso Dios sabe que cuando ustedes coman de ese árbol, comprenderán todo mejor; serán como dioses porque podrán diferenciar entre el bien y el mal. (Itálicos míos).

Nos acusa día y noche

¿Jamás te has sentido culpable por cosas que ya confesaste y te arrepentiste? Satanás es un maestro por acusar y recordarnos de los pecados que hemos cometido. La próxima vez que te acusa de algo que ya confesaste y te arrepentiste, recuérdale su destino eterno. Continuamos con dos textos que lo describen como un acusador incansable.

Zacarias 3:1: Luego, el ángel me mostró al sumo sacerdote Josué que estaba de pie frente al ángel del SEÑOR. Satanás estaba al lado derecho de Josué para acusarlo. 

Apocalipsis 12:10: Luego, oí una fuerte voz en el cielo que decía: «Han llegado ahora la victoria, el poder, el reino de nuestro Dios y el poder de su Mesías; porque ha sido arrojado a la tierra el que de día y de noche acusaba a nuestros hermanos delante de Dios. (Itálicos míos).

Satanás no duda que Jesús es el hijo de Dios y que la salvación únicamente viene por poner nuestra fe en Jesús.

Impide el evangelio

Satanás sabe que la fe en Jesús es la única manera de ser salvado. Sabe eso, pero no quiere que lo sepamos, al contrario, quiere que rechacemos esta verdad y que creemos cualquier otra cosa para que nos condenemos a una eternidad en el infierno con él. Trata como pueda de impedir el oír del evangelio. Como seguidores de Cristo nuestro trabajo principal es difundir las buenas nuevas del evangelio. Satanás usa todas las armas a su disposición para impedir el evangelio. Continuamos con dos versículos sobre cómo Satanás trata de impedir el evangelio.

I Tesalonicenses 2:18: En verdad queríamos ir a verlos, y yo mismo traté de visitarlos varias veces, pero Satanás siempre nos lo impidió.

II Corintios 4:4: El dios de este mundo ha nublado la mente de esa gente que no tiene fe en Cristo. No los deja ver la luz que traen las buenas noticias acerca de la gloria de Cristo, quien es la imagen de Dios

Es el padre de mentiras

Todo lo que Satanás dice es una mentira; si está hablando, está mintiendo. Mezcla la verdad con un engaño. Le encanta usar la palabra de Dios para decir una media verdad mezclada con un toque de maldad. Se disfraza como bueno, siendo la personificación de la maldad. Hay tan solo una verdad confiable: la palabra de Dios, completa, sin ser mezclada, torcida, ni manipulada. Continuamos el texto con dos versículos sobre cómo es el padre de las mentiras.

II Corintios 11:14:  Eso no nos sorprende porque Satanás también se disfraza de ángel de luz.

Juan 8:44:  Ustedes son de su padre el diablo y les gusta hacer las maldades que el diablo quiere que hagan. Desde el comienzo él fue un asesino y no tiene nada que ver con la verdad porque no hay verdad en él. Cuando dice mentiras, habla de lo suyo porque es un mentiroso y padre de la mentira. (Itálicos míos). 

Ni Satanás ni los demonios estarán encargados del infierno.

Su destino eterno

Por un momento, cuando Jesús colgó en la cruz, Satanás celebró, pensando que había ganado. Pero con este sacrificio, Dios selló el destino de Satanás y nos ofrece la salvación. Nunca te olvides porqué Satanás quiere que te caigas en pecado y nunca creas en el evangelio: está furioso porque ya sabe el destino eterno que le espera. El infierno no será una fiesta eterna para Satanás y los demonios; estarán atormentados día y noche para siempre, igual como los que no ponen su fe en Jesucristo. Terminamos nuestro estudio con el destino eterno de Satanás.

Apocalipsis 20:2-3, 7-10: El ángel atrapó al dragón, a esa serpiente antigua que es el Diablo o Satanás, y lo encadenó durante 1000 años. Luego, lo arrojó al abismo, lo encerró y selló la salida para que no engañara más a la gente hasta que pasaran los 1000 años. Después de los 1000 años, será puesto en libertad por corto tiempo.7 Cuando terminen los 1000 años, Satanás quedará libre de su prisión en el abismo. Irá a engañar a las naciones de todo el mundo... El ejército de Satanás marchará ... Pero caerá fuego del cielo y destruirá al ejército de Satanás. El diablo, el que engañó a esa gente, será arrojado al lago de fuego y azufre, donde están la bestia y el falso profeta. Allí sufrirán día y noche para siempre. (Itálicos míos).